Guerra de cada día.
Acudí a ver Fury (me niego a llamarla como se ha titulado aquí) con una poca de cautela. No niego que el director David Ayer, responsable también de la divertidísima Sabotaje, es un director que se maneja en la acción de manera excelente, si no ahí están Sin Tregua o la mentada película con Chache, además que como guionista está de sobra abalado gracias a sus colaboraciones con Antoine Fuqua o cuando le toca en solitario (Vidas al límite), pero si os soy sincero, no le veía capaz de que fuera capaz de hacer un film bélico de corte clásico, más aún, su manera de rodar le hacía el menos indicado para tal empresa. Tras acabar de ver el film no sólo esas dudas desaparecieron, si no que tuve unas ganas tremendas de ver la próxima película que dirija este buen señor...Suicide Squad...ejem.
Puede que lo más negativo se encuentre en ciertos tramos del guión que pecan de ser demasiado evidentes y que acaban cortando de manera abrupta la acción, y que se ven sobretodo cuando los personajes abandonan momentáneamente el tanque, como es la escena en la casa de las dos chicas alemanas en donde vemos a una escena costumbrista algo chocante e innecesaria si se comparan con el resto del film. Además, esa pseudo historia de ¿amor? parece estar metida con calzador, como si fuera una exigencia de la productora, por no hablar del modo en el que se cierra y que solamente falta ponerle un cartel con neones en el que se lea "LOS HORRORES DE LA GUERRA". ¿Moralina barata en un film bélico? Sí, no es raro encontrarlo en este tipo de películas, pero tenía la esperanza de no encontrarla en ESTA película.
No se puede decir que Brad Pitt haga aquí el papel de su vida, debido sobretodo a que nunca dejamos de ver a un Aldo Raine afeitado, pero sí hay que decir que el actor de Kalifornia hace un papelón de los que sentirse orgulloso. Plus añadido el que en ningún momento de la película sabemos mucho más que los pequeños detalles que se nos dan acerca de su personaje - solamente sabemos que lleva combatiendo mucho, sabe hablar de forma fluida el alemán y que tiene la espalda marcada -, cosa que hace que la interpretación de Pitt cobre más fuerza según avanza la trama. Puede que el personaje de toda esta tropa con el cual nunca acabamos de empatizar sea curiosamente el novato, interpretado por Logan Lerman, quien no lo hace mal por cierto. Demasiado arquetícpico, tal y como está estructurado desde el principio sabemos todo el recorrido y el final que va a tener este personaje (momentos altos, bajos, tristeza...etc). Mejor desarrollados se encuentran los roles (no secuandarios como se ha dicho) de Shia LaBeouf, Jon Bernthal y Michael Peña, cosa que enfatiza sus sublimes interpretaciones, las cuales en un principio nos transmiten mucho con sólo unos trazos de personalidad - la escena principal contrasta con una escena casi al final -. Sin duda todos ellos son el verdadero motor del film. También aparecen en pantalla unos episódicos Xavier Samuel, Scott Eastwood (el hijísimo) y Jason Isaacs, a quienes me dio la sensación de que les han recortado sus papeles de cara a agilizar el montaje final de la película, cosa que no me extrañaría dado que esta dura más de dos horas.
Los efectos visuales, si bien son bastante correctos en las escenas de batalla, las cuales son simplemente espectaculares, eché en falta un mayor empleo de efectos tradicionales como las maquetas o miniaturas. Cantan las escenas donde por ejemplo hay fuego y este se ve claramente que es un efecto especial, por no hablar de los disparos de artillería y de metralleta, donde las trazadoras se parecen más a los blasters de Star Wars - incluso los disparos de los nazis son verdes y los de los americanos rojos, flipa -. Mejor están echas se encuentran las escenas donde hace acto de aparición el gore, y que Ayer rueda cortarse un pelo, reservándose no poca hemoglobina - la decapitación de la cabeza de un soldado por parte de un obús - y sí mostrando mucha crudeza hasta el punto de hacerse incómoda - la "ejecución" de un soldado de las SS -.
En resumidas cuentas, una película bélica clásica, tanto en su contenido como en la forma en la que está dirigida. Una crudísima historia que acaba sustentada por unos personajes genialmente desarrollados y salpicada por unas escenas de acción sublimes.
Fury para mi sorpresa ha acabado resultado una película bélica muy competente.
Fury para mi sorpresa ha acabado resultado una película bélica muy competente.
Nota: 8