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Los payasos asesinos del espacio exterior (1988) de Stephen Chiodo

Payasos cabreados del espacio exterior.

Simpaticona comedia de terror (aunque de terror poco) donde los protagonistas no son otros que unos grotescos payasetes alienígenas con ganas de zamparse a medio pueblo, transformándolo previamente en algodón de azúcar, y al otro medio cargárselo de la forma más circense posible (no en vano, su nave espacial es...¡UNA CARPA DE CIRCO!) mientras van encadenando una serie de putadillas tras otras.

Este es uno de los casos en lo que te hacen preguntarte ¿qué fue antes? ¿el huevo o la gallina? O, directamente ¿Esta película copia a Mal Gusto (Peter Jackson, 1987) estrenada un año antes, o simplemente es una coincidencia muy grande que, salvando las (cercanas) distancias, ambas películas compartan el mismo argumento? Sí, es cierto que Killer Klowns tiene un humor más "ligero"(aunque también palme hasta el apuntador) si se compara con el humor de brocha gorda con el que Jackson pintó su ópera prima, además, tampoco tiene tanto gore, incluso diría que los payasos no derraman ni una gota de sangre a lo largo del film, pero ambas comparten tantas similitudes - aliens deformes caníbales de aspecto cómico, protagonistas humanos tontorrones y pasados de vueltas, final en la nave/hogar de los alienígenas ... - que me hacen pensar que los hermanos Chiodo debieron verse Mal gusto no pocas veces antes de ponerse a escribir el guión. Con todo, años después admitieron que si "homenajearon" a un film, ese sería The Blob ( Irvin S. Yeaworth Jr. 1958), película que curiosamente, el mismo año del estreno de Killer Klowns tuvo un remake (Chuck Russell, 1988). Todo está unido.

La película fue un relativo éxito de taquilla aunque más de alquiler; costando unos 2 millones de dólares, los cuales por cierto lucen de puta madre en pantalla (ya les gustaría a muchos directores contar con esos sets), y logró recaudar unos nada desdeñables 33 millones a nivel mundial.

Dirige Stephen Chiodo, quien pese a no dirigir nada de relevancia tras esta película (lleva intentando levantar una secuela desde los noventa), sí que ha ido participando en diversos proyectos ejerciendo de titiritero, su trabajo real.

Muy divertida, y con una canción principal que se queda marcada a fuego en la psique.