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El Séptimo Hijo (2014) de Sergey Bodrov


Épica de saldo

Hace ya algún tiempo que el género de fantasía, tras un parón, y varios subproductos de la talla de Dragones y Mazmorras, volvió para quedarse y sentar cátedra dentro de lo que es el cine de hoy en día. Pese lo que les pese a sus detractores, las sagas de Harry Potter, Las crónicas de Narnia (sus tres entregas son muy reivindicables) El señor de los anillos revitalizaron este género demostrando que aún era posible hacer cine de aventuras de calidad respetando las bases de las aventuras clásicas, y sobretodo que aunaran a crítica y público en un rotundo "oh, sí". Por desgracia, poco después este movimiento fue perdiendo paulatinamente fuelle, dando de nuevo paso a películas de dudosa calidad que semana tras semana se estrenaban en salas comerciales, como EragonLas crónicas de Spiderwick o Arthur y los Minimoys, y que a más de un espectador le dejó con un buen dolor de cabeza. Aunque si algo fue lo que acabó por rematar a este género cerca del final de la década pasada fue la saga Crepúsculo. Odiada por muchos y amada por otros otros tantos, sin duda alguna la saga de los vampiros fosforitos fue uno de los negocios más lucrativos a nivel cinematográfico, pero que fue un todo vale en toda regla, dando vía libre a películas de aventuras de carácter juvenil/infantil de menor calidad si cabe a las citadas, salvo excepciones honrosas como El corredor del laberinto. Ahora le toca el turno a esta El séptimo hijo, saga de sobre capa, espada y brujería la cual no tengo referentes puesto que ni he leído el libro. Eso sí, ni ganas me han quedado.

La historia más tópica no puede ser; ya sabéis, lucha ancestral del bien contra el mal, la búsqueda de un elegido que devuelva el equilibrio a la fuerza y demás. Tan consciente es la película de lo que es, que el director Sergey Bodrov (autor de la notable Mongol) y los guionistas Charles Leavitt (autor de Diamante de sangre, ¡¡por Diox!!) y Steven Knight (Redención) no tienen apenas margen de maniobra y van del punto A al punto B sin despeinarse. Es decir, salvo sus primeros minutos - donde vemos la mejor escena de la película -, en donde podemos atisbar lo que es un poco de riesgo al ofrecernos algo no novedosos pero sí hasta cierto punto original, la película no se separa del camino mostrado con anterioridad en otras películas. Como he dicho, no me he leído el libro, pero si es así...tela. Los efectos especiales al menos están bastante logrados, y acaban destacando las escenas de lucha y de peleas masivas que es donde acaban luciendo más.

En cuanto a los intérpretes destacar el error de casting que supone dar el protagonismo de la cinta al inglés Ben Barnes, actor al que considero sobrevalorado desde los tiempos de Príncipe Caspian y El retrato de Dorian Grey, y que aquí no hace más que aportar su cara bonita y ya, puesto que nos interesa cero sus motivaciones y su (nula) evolución a lo largo de la trama. No ayuda al asunto su comparsa femenina, con la cual crean una pseudo historia de amor imposible - mil veces vista y con más gracia - que no hace si no aumentar la desgana general. Lo de Kit Harington y Djimon Hounsou mejor dejarlo para otro día.

Lo que mejor parados salen son los veteranos Julianne Moore y Jeff Bridges que saben aportar al menos un saber estar envidiable, todo ello marca de la vieja escuela, aunque se nota que duras penas lo consiguen dado que tienen que aguantar el tipo con unos roles tan faltos de entidad como de empaque, muy acordes con el resto de la cinta. Una auténtica lástima.

En resumidas cuentas, aunque no llega a resultarnos un producto aborrecible gracias a ciertos momentos y a la labor de Moore y Bridges, El séptimo hijo cae en el error de no ofrecer un "algo más" que la distinga de otras epopeyas de magia y espada ya vistas, cayendo muy a menudo en los tópicos que acaban finalmente convirtiéndola en una aventura sin gracia ni alma. 

Nota: 4

¿Y no lo tenéis ConSajo?

Teaser-Tráiler de Los Juegos del hambre: Sinsajo, el primer capítulo del final de la saga.

No he visto nada relacionado con esta saga. Ni he leído los libros, ni he visto la película aunque esté protagonizada por mi amor, pero admito que este teaser no pinta mal, al menos promete una distopía en la que abunda la caña.

Algo es.

Dirige Francis Lawrence (Soy leyenda y Constantine, bravo) a partir de un guión de Danny Strong y Peter Craig, y estará protagonizada por Jennifer Lawrence, Julianne Morre y Philip Seymour Hoffman entre otros.


¿Qué te han hecho Julianne?

La unión entre Julianne Moore y un perro de lanas


No soy un fan de la saga "Los juegos del hambre", ni siquiera he leído alguno de los libros/visto alguna de las películas que se han hecho, y eso que me considero fan de Ella, pero ha sido ver la caracterización que le han dado a la pelirroja de "Boogie Nights" y, toda, pero TODA pequeñísima gana que tuviera o interés puesto, se ha desvanecido por complet... ¡¡Joder!!¡¡QUE ES JULIANNE MOORE!! 

Cabrones... que os jodan.

Non-Stop (2014)



Intensísimo thriller de acción made in Collet-Serra


Vayan por delante mis respetos hacia el realizador catalán Jaume Collet-Serra. Este cineasta español emigró a la meca del cine cuando cumplió la mayoría de edad con la intención de triunfar en Hollywood. Sabia decisión. Veintidos años después, dicho y hecho, consigue liderar la taquilla norteamericana con su último film, titulado o subtitulado en España como "Sin Escalas" y protagonizado por un icono de la acción cinematográfica de los últimos lustros: Liam Neeson aka Qui-Gon Jinn. Y no es la primera vez, ya lo hizo en el 2011 con idéntica fórmula. Thriller de acción policíaco protagonizado por Neeson y que lleva por título "Unknown" (Sin Identidad). Anteriormente había abordado el terror con trabajos interesantes como "La Huérfana" (2009) o la comercial pero efectiva "La Casa de Cera" (2005). En esta ocasión a parte de disfrutar de un pasatiempo divertido aprendemos el funcionamiento post 11-S de la seguridad aérea americana, premisa sobre la cual gira la trama principal de la cinta. Con un inicio depresivo en el que pronto nos pone en la situación de actualidad de nuestro protagonista, este thriller intimista salpicado de acción bien rodada no se olvida de los tópicos, siempre y cuando estos sean necesarios. Goza, eso si, de un guión inteligente en el que casa a la perfección  el uso de las nuevas tecnologías, que tanto invaden nuestro cine de hoy en día, y lleno de trampas. Trampas que juegan a su antojo con el espectador, cambiándonos de sospechoso principal en un abrir y cerrar de plano. Llega un momento incluso en el que esta formula se repite tanto y de tal manera que parece que estamos asistiendo al visionado de un slasher en potencia. Y a todos estos elementos les asisten la realización de un montaje frenético y novedoso. Frenético por que haciendo honor a su título, una vez que se desarrolla el conflicto en el avión la estructura del film es un no parar en todos los ámbitos y novedoso por la indulgente
manera de la que se lleva a cabo la conversación vía teléfono móvil entre los implicados en el argumento. En el plano actoral, al igual que en el resto del film, nada que reprochar. Eficiente y creíble Liam Neeson una vez más, y ya van... o más. Y correctísima en su rol a su vez Julianne Moore, desempeñando un divertido papel que bien es cierto también que es un personaje que da la sensación de que nada habría ocurrido de no aparecer en la cinta, esas cosas que a veces pasan cuando una estrella interpreta un papel de reparto. Finalmente, con un desenlace que no decepciona y tras habérsete echo cortísimas las casi dos horas de duración del metraje, Collet-Serra demuestra que no hace falta implicar un desembolso trillonario de dólares o adaptar novelas acarameladas de pseudo-vampiros gays para liderar, aunque tan solo sea una semana, la taquilla del país de la industria cinematográfica.




Carrie (2013)



Antes de empezar a hablar largo y tendido sobre esta nueva versión de "Carrie", quisiese decir de ella que si por algo destaca/aqueja este film es ser tanto una película correcta como un remake correcto.
Correcta en su dirección, correcto en su guión, correcta en sus actuaciones, correcta en su música, correcto en su desarrollo...todo, absolutamente todo en ella es correcto durante su ajustada hora y tres cuartos de duración. Una cosa que no está nada mal, incluso más de un remake reciente firmaría por ser como esta cinta, pero tras verla y repasarla unas cuantas veces en tu cabeza, ese "correcto" que tan buen gusto te dejó empieza a pesar (mucho), llegando a ser su mayor carencia, aunque de eso hablaré un poco más abajo.

Así que sin más dilación pasemos a ahondar en la historia de esta telequinética llamada Carietta White.

LA SANGRE ES VIDA

En esta clase de películas es fácil caer en las comparaciones tanto con el libro al que adaptan como con la película a la que remakea, pero siendo sinceros pocos de los chavales que estaban en la sala el otro día habrían leído o visto tanto el libro de Stephen King como la película de De Palma (geniales ambas), así que en este caso la realización de este remake, pese a no estar justificado al cien por cien, sí que se le puede ver un motivo achacando el bache generacional ya que muchos pueden considerar desfasadas las mentadas adaptaciones. Y la verdad es que trasladar esta historia al siglo veintiuno funciona bastante mejor de lo que cabría esperar.
El guión de Roberto Aguirre-Sacasa pese a no inventar el fuego resuelve la papeleta de adaptar una nvela/película mítica, actualizando única y exclusivamente lo necesario, por ejemplo, en los momentos en donde antes había un acoso directo por parte de la pandilla de Chris hacia Carrie, aquí hay encontramos el tan en boga ciberacoso, un vídeo colgado por Chris en YouTube para ser más exactos, como desencadenante de los hechos. Un acto a mi parecer más cruel que en la original, ya que el momento de las duchas ahora no sólo es visto por las chicas, si no que al ser colgado el vídeo en internet puede ser visto por todo el instituto, y por supuesto el mundo. Lo que no acaba de casarme tanto es como esta "nueva" Carrie no sabe lo que es la menstruación, ya no solo porque no lo haya oído entre sus compañeras de instituto, si no que es de suponer que hoy en día las clases de orientación sexual son impartidas en todas las escuelas occidentales, y la escusa que nos ponen de que la protagonista está totalmente alienada por la madre (incluso se dice que durante un tiempo es educada por ella en casa) es un argumento que no acaba por sostenerse según avanza la historia.
Ya centrándome en la dirección de Kimberly Peirce, de la que a parte de esta, de ella sólo he visto "Boys don´t Cry", que me pareció regulera, aquí opta por no destacar demasiado y simplemente sigue el camino marcado por De Palma, cosa que no esta mal ya que el original es inmejorable, pero te quedas con la sensación de que Peirce ha desaprovechado una ocasión de oro para ir un poco más allá, por ejemplo mostrando un poco más a ese profesor al que se le presupone liado con una de sus alumnas, o incluso de quedarse corta con la capacidad destructiva de la que Carrie hace gala al final, aún así la verdad que hace un buen trabajo, correcto más bien. Destacables son las escenas entre la protagonista y su madre, la mayoría en la casa, siendo de aplauso cómo rueda la famosa escena en la que Carrie acaba encerrada en el armario, predominando el plano medio y la sensación de asfixia y opresión, apoyándose en las imágenes sutiles pero impactantes (¿ese Cristo crucificado sangrando es una alucinación o no?).

MADRE E HIJA

No podría hablarse de una adaptación de "Carrie" si no se habla sobre la relación materno filial amor/odio que se establece entre la marginada chica y su ultracatólica madre. El principio, con la potente escena de parto (el mejor cambio con respecto a la de De Palma), nos pone en la pista de cómo serán las cosas ahora, y creerme, la madre de Moore poco o nada tendrá que ver con la que hizo Pipper Laurie en los setenta. Moore consigue que en una escena la cojamos cierta simpatía para acto seguido mirarla con un gesto de pavor, para al momento volverla a mirar con cierto margen de pena, demostrando que Moore tiene o le han dejado desarrollar un poco más a su personaje en esta versión. No me mal interpretéis, la interpretación de Laurie sigue siendo increíble, y aún a día de hoy resulta amenazante oculta tras esa falsa caridad cristiana, pero eso no quita que la interpretación de Moore sea más trabajada e inquietante, ver si no la escena en la sastrería con la madre de Sue o el final cuando se desata la tragedia. Sin duda lo mejor del film.
No mucho más atrás se queda Chloe Moretz en el papel principal, aunque cierto es que su precedente hace una sombra que llega a asustar (y lógico), pero la actriz logra que, no olvidarnos de Sisi Spacek porque eso es imposible, pero sí que podamos sentir algo respecto a su personaje, y que seguramente otra actriz en su luegar hubiese optado por pasarse de rosca y  sobreactuar en exceso. Otro punto a su favor es que en ningún momento interpreta al "patito feo rodeado de cisnes", como dice el libro, si no que aquí es simple y llanamente la rarita del instituto a la que su madre oprime y maneja a su antojo. El fallo que le veo a su interpretación es la falta de crueldad de la que hace gala de cara al final. No sé, no le vi un atisbo de maldad, de un poder sobrehumano manejado indiscriminadamente por una niña dolida, sólo a una chica encargándose de los capullos que han echado a perder su baile de fin de curso, aunque eso supongo que es cosa de la directora que no ha sabido ir más allá. Aún así Moretz hace un trabajo digno, más del que se le está reconociendo, si no ver las escenas con Moore que son donde más luce esta pequeña actriz.
Los demás actores actúan de manera solvente, aunque se echa en falta alguna novedad en sus papeles, ya que a fin de cuentas son los mismos salvo pequeñas variaciones y alguna que otra explicación de sus motivaciones. Los papeles de Sue y de Chris, interpretados respectivamente por Gabriella Wilde y Portia Doubleday son los que más varían con respecto a la original, siendo la primera más tridimensional y se explica el  verdadero porque de dejar a Carrie ir al baile por ella, mientras que la segunda es incluso más bestial y llena de maldad que  la interpretada por Nancy Allen. Los demás actores simplemente bien, algunos mejor que otros, pero correctos (sí, ya lo sé).

BAILAR, BAILAR MALDITOS

Da cierta pena que con la cantidad de medios de los que se dispone hoy en día, la cantidad de efectos con los que maneja la industria de Hollywood, cabrea que el final de esta cinta, el punto álgido que tan bien resolvió De Palma en los setenta con medios tradicionales, se haya quedado en un conjunto de efectos encadenados con mejor o peor fortuna, pero que a fin de cuentas acaba por ser lo peor de la cinta. Con esto no quiero decir que sea una mala escena, pero es aquí donde más pesa ese "correcto" que tanto he repetido a lo largo de esta crítica, de tan correcta y complaciente que es durante esa escena hace que no me la crea en ningún momento, ya no solo por los efectos que son de un videojueguil que asusta, en vez de usar los efectos tradiciones que tan bien funcionaban, si no porque la masacre final se queda en una pequeña escaramuza en la que se salvan muchos ya que Carrie es más específica en su venganza, haciendo que aparte de poco interesante quede descafeinada. 
Lo mejor hubiera sido ver como Carrie quemaba hasta los cimientos el pueblo entero, pero eso ya es valoración mía.

En resumidas cuentas, una película correcta con la que pasé un rato entretenido, pero ya. 
No es una película que vaya a ser recordada como la novela o  la película original, aunque he de decir que es mucho mejor que cualquier otro remake de esta historia que se haya hecho con anterioridad.

NOTA: 6